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Trascender, pero hacia donde? Subir, pero a qué altura?

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                  - Usted siempre ha dicho que trabajar en literatura es, en muchos sentidos, más importante que trabajar en filosofía.
_ La literatura es más importante en un sentido muy específico; cuando se trata de llevar a efecto el progreso moral. La literatura contribuye a la expansión de la facultad de la imaginación moral en cuanto que nos hace más sensibles, en tanto que nos hace profundizar en nuestra comprensión de las diferencias entre los hombres y sus distintas necesidades. La filosofía es útil cuando trata de sintetizar nuestras propias intuiciones morales en principios morales. Pero no sirve para la ampliación de estas intuiciones. Las reflexiones filosóficas no contribuyeron mucho a la abolición de la esclavitud, al contrario que algunas historias sobre la vida de los esclavos."

Entrevista al filósofo Richard Rorty llevada a cabo por R.Kaiser, H.Mayer y W.Ulrich, bajo el título "Es bueno persuadir". en "Cuidar la libertad" Ed. Eduardo Mendieta.

Escuchaba ayer a Fernando Savater decir que en ocasiones le convocan para acudir a colegios con el fin de animar a la lectura. Con su típico sentido del humor ilustraba lo que suponía para él. Puesto que le gusta tanto leer, invitar a la lectura a otros es algo así como si tuviese que animar a comer jamón de jabugo." La lectura multiplica el alma" decía. A mi me ocurre otro tanto, no concibo la vida sin la lectura, un placer pero también un deber. Como el jamón de jabugo.

En los últimos tiempos he tenido entre mis lecturas un par de novelas de Wallace Stegner: "En lugar seguro" que narra la larga relación de amistad, llena de complejidades, entre dos parejas de profesores de universidad  y Ángulo de reposo" el relato intimista de un historiador sobre la vida de sus abuelos, ingeniero y escritora e ilustradora,  que inician su  tremendamente dificultosa andadura por  los territorios sin civilizar del Viejo Oeste californiano;  una obra del escritor-viajero-caminante  Patrick Leigh Fermor llamada "Un tiempo para callar" en la que describe gracias a sus estancias en determinadas abadías de benedictinos, cistercienses y trapenses, los rigores de la vida monástica de estas órdenes de estricta observancia , el ensayo "Qué es el arte" de Tolstoi, reflexiones en un intento de definir el arte más allá del concepto de belleza que siempre le acompaña;  y tengo entre manos la voluminosa "Has de cambiar tu vida" del filósofo Peter Sloterdijk, título basado en la voz que oyó Rilke en el Louvre y bajo él cual el filósofo desarrolla una producción original de investigaciones acerca del hombre actual en un mundo que "no puede negarse: el único hecho de importancia ética universal en el mundo actual es el reconocimiento, cada vez mayor y difusamente omnipresente, de que así no se puede continuar" Todos ellos apasionantes, muy recomendables. La lectura de las novelas fué un auténtico placer, el ensayo de Tolstoi esclarecedor y pedagógico, y desentrañar nuevamente las tesis de Sloterdijk  es un empeño que me tiene entusiasmada.

 La contestación que Richard Rorty ofrece a sus entrevistadores en el fragmento que abre esta entrada me ha hecho reflexionar. En primer lugar diré que creo que tiene razón. La ficción, espejo,al fin y al cabo, de la realidad, nos coloca frente a otras formas de vida, otras culturas, otros caracteres, amplia nuestros horizontes de narratividad, los embellece, los cuestiona, los contrapone, los enriquece en suma, impide que nos encastillemos en la cómoda pero anonadante subjetividad porque "comprender" es nuestra esencia y comprendiendo es como somos más humanos.                                                                                             En cuanto al ejercicio de  la filosofía, ese amor por sustanciar nuestras intuiciones, ese afán por rebasar los límites, ese esfuerzo heroico por trascender, voy a remitirme a un fragmento del libro en cuestión "Has de cambiar tu vida" que pueda, entre mil, definir su función:                                                                                                                                
"El autor de la Gaya Ciencia (refiriéndose a Nietszche) era consciente de hasta qué punto èl seguía siendo devoto. Al mismo tiempo, entendía ya lo suficiente de las reglas de juego que rigen en el astro ascético como para tener claro que todas las ascensiones comienzan en el campamento-base de la vida corriente. Sus preguntas; Trascender, pero hacia donde? subir, pero a qué altura? , se habrían contestado por sí solas si él hubiera permanecido asentado en el suelo  de los hechos ascéticos. Pero estaba demasiado enfermo para seguir lo que decía su conocimiento más importante, a saber: el asunto principal en la vida es tomar en serio los asuntos secundarios. Cuando los asuntos secundarios fortalecen, se ve refrenado el peligro dimanante del asunto principal. Ascender más alto en lo secundario viene a significar luego que se avanza en lo principal." Ahí lo dejo, a interpretación. Que en eso consiste la filosofía. Esdedesear.









                                                                                                                                                                                                                                                                           

Ayuno de filosofía



20070702222627-corria-abril-de-1996...Ante la reducción de las posibilidades de acceso (a no ser que se produzca un sorpresivo aumento de elección de la materia, que pasa a ser optativa) de los jóvenes a la Filosofía que establece la nueva ley de educación.

"Por más poderoso que sea el que agravia, deja armas para la venganza"

   Tú, ya, ¡oh ministro!, afirma tu cuidado
en no injuriar al mísero y al fuerte;
cuando les quites oro y plata, advierte
que les dejas el hierro acicalado

   Dejas espada y lanza al desdichado,
y poder y razón para vencerte;
no sabe pueblo ayuno temer muerte;
armas quedan al pueblo despojado.

Quien ve su perdición cierta, aborrece,
más que su perdición, la causa della;
y ésta, no aquella, es más quien le enfurece.

Arma su desnudez y su querella
con desesperación cuando le ofrece
venganza del rigor quien le atropella.

Soneto de Francisco de Quevedo

Durante mucho tiempo, mucho antes de la crisis, siempre pensé que nuestra enseñanza adolecía de grandes carencias, fundamentales, vitales,  que consistían en no darle mayor relevancia al estudio de la música, la filosofía y el fomento del deporte en los colegios. El deporte y la música se las fueron arreglando milagrosamente para subsistir sin una verdadera planificación desde las instancias educativas. La sociedad de consumo  ofreció alguna forma de atractivo, y florecieron con relativo éxito. Hay por doquier escuelas deportivas, conservatorios, y muchos padres fomentan voluntariamente en sus hijos el ejercicio de estas disciplinas. El camino de la filosofía no discurrió paralelo. Razones habrá, de eso estoy segura y dejo a los profesionales su análisis y defensa, si es que la merece. Las sociedades libres disponen libremente de sus recursos y los ordenan objetivamente "la Ciudad es más grande que el individuo" afirmaba Sócrates.

Si de algo estoy convencida es de la necesidad de fundamentar nuestras opiniones, decisiones, elecciones, y el sentido de nuestras vidas, en la reflexión que conduce al sano y libre pensamiento. Eso es algo que es necesario aprender en lo íntimo pero que requiere un esfuerzo lógico imposible de llevar a cabo sin una labor de interpretación y estudio de los grandes pensadores y los grandes pensamientos. Y ahora más convencida todavía cuando sospecho que detrás de esta crisis está la enorme falta de sentido común al que tan aficionado era Aristóteles.

El pueblo ayuno, se vengará en una u otra forma, como dice Quevedo, pero para ello hace falta que se haga consciente de qué verdaderamente está ayuno. La Ciudad es más grande pero le hacen falta Ciudadanos para ser más libre. Esdedesear

¿Filosofar es no vivir?

"A esta faceta menos explorada he dedicado más de cuarenta años de meditación. Y no evito la exageración aparente, que puede ser fácilmente caricaturizable, pues no pretendo sugerir que pasé cuarenta años en meditación. La exageración no es tal, y creo que podría decir que es una proposición muy exigua, sea quien fuere el sujeto que la confiese, sin metir. Meditar en la función esencial del eros no implica el prestigioso postulado: "Filosofar es no vivir", muy al contrario, esa meditación, que puede empezar con la propia vida, es algo más íntimo, más total y absoluto que el mismo diálogo interior, puesto que en éste- ya que es diálogo, prevalece cierta dualidad, mientras que la meditación del eros puede no ser más que el efecto de una transmutación; lo que resulta, brota, se produce cuando la carne se hace verbo."
Del Prólogo de "Saturnal", por Rosa Chacel.

Hemos estado repasando modelos:...representación abstracta, conceptual, gráfica o visual... más sentimentales que racionales, de mujer, al menos eso es lo que yo quería haberos contado estos días. Pelagia, Karen y Jane, como os dije, son en mi memoria, en mi corazón, el resultado involuntario de un recuerdo selectivo ajeno a mi propia intencionalidad. Ocultos pero eficientes, creo yo. Estuvo muy bien volver a re-cordar. Mujeres de tres épocas distantes en el tiempo, materializando sus existencias en el mismo espacio: El amor. Pero ahora quiero hablaros de una figura de mujer, real, que admiro y respeto y hasta donde puedan separarse esos espacios si ello es posible, situo más en el terreno de la conciencia que de la imaginación. Conciencia de haberla elegido y seguido. Rosa Chacel, mujer, pensadora y escritora, cuya gran personalidad se evidencia en esta entrevista que os remito a continuación. Nada de lo que yo pueda decir añadiría valor a sus palabras. Así que callo porque esdedesear.




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